Aparato locomotor de un gato
El aparato locomotor de un gato se compone de los músculos, huesos, articulaciones, ligamentos y en el que participa el sistema servioso.

La estructura es bastante uniforme en esta especie, hay gatos más grandes por raza que otros pero no son diferencias tan exageradas como en el mundo canino.

Morfológicamente se distingue a los gatos por tres tipos básicos:
  • Cobby- son cuerpos compactos y macizos, con cara poco prominente, patas gruesas y cortas, caderas anchas; cabeza y orejas son pequeñas y redondeadas.
  • Mediano-Cuerpo mediano, más esbelto que cobby, patas medianas; orejas menos redondeadas; cara intermedia con menos stop.
  • Oriental-Son cuerpos esbeltos, alargados, de miembros y cola finos y más largos, la cara es cuneiforme, de perfil recto sin stop; grandes orejas puntiagudas.
Pero hay una explicación más extensa con 6 tipos, que son los básicos y los intermedios.

El esqueleto está compuesto por 245 huesos, éstos son cilíndricos, largos y ligeros. Lo que le caracteriza especialmente es la flexibilidad de su espina dorsal, debido a que sus vértebras se encuentran más separadas que las nuestras y les proporciona una mayor amplitud de movimientos.

Los huesos de la cola, al ser más flexibles, le facilitan movimientos de ésta para mantener el equilibrio en movimiento, al dar un gran salto o a caer desde un lugar elevado.
Se puede notar que un gato no acostumbrado a estar cogido en brazos boca abajo, además de estar inquieto deseando volver al suelo, mueve la cola en círculos para volver a estar de pie.
En el cráneo de un gato lo más visible es las grandes cuencas de los ojos, donde vemos la importancia del sentido de la vista para estos animales.

Las articulaciones son especialmente ligeras, tanto el las uniones en la cadera como en los hombros. Los omoplatos los tienen a ambos lados del tórax, permitiéndoles pasar por lugares extrechos para esconderse o simplemente atravesarlos para acceder a otra zona. En la cadera la unión con los huesos de la pata también es muy ligera, lo que ayuda para el gran impulso que tienen que coger para dar un salto.

Musculatura: tienen cerca de 500 músculos, que junto con las flexibles vértebras y la fortaleza de los cuartos traseros, hace del gato un cuerpo preparado para la caza.
Los músculos de la cabeza, incluyendo los de las mandíbulas le hacen tener un mordisco poderoso capaz de acabar con la presa presionando entre las vértebras de ésta para acabar con ella.

Entre los diferente movimientos están caminar, correr, saltar, trepar, acechar, caer de pie.

Caminar: imaginemos a un gato sentado, en reposo. Para empezar a caminar avanza primero la pata derecha delantera, después le sigue la trasera izquierda, la trasera derecha y finalmente la delantera izquierda. Algo así:

Al correr avanzan ambas patas traseras para hacer la zancada y las delanteras para apoyarse.
Para saltar cogen impulso con la fuerza de las patas traseras, pudiendo saltar hasta 6 veces su propia altura de un solo impulso.

Trepando se ayudan de sus afiladas uñas, que sacan de su funda entre los dedos para agarrarse fuertemente al tronco de un árbol o un muro elevado después de un gran salto.
Cuando están al acecho son capaces de mantenerse inmóviles durante un rato largo hasta que creen que pueden atacar a su víctima. Se mueven con precisión, con movimientos muy suaves y casi imperceptibles y de pronto con gran rapidez atacan.

Ver como un gato se las apaña para caer con las patas desde una altura en la que se encuentre o no boca abajo es una manifestación de su potente sentido del equilibrio.
Es capaz de girarse sobre sí mismo y caer sano y salvo con el apoyo de sus patas. Tiene más posibilidades de sobrevivir desde una altura mayor que desde un primer piso, pues le da tiempo a girarse y prepararse para la caída. Un caso que conozco de un gato que sobrevivió a caerse desde un quinto, y otro de matarse desde un árbol.
Algo que nunca sabremos es lo que le pasó a nuestro gato Bloo

El cuerpo de un gato no es apto para la carrera prolongada, tampoco para los demás felinos exceptuando el guepardo, pues se fatiga pronto. Por eso su as es la habilidad de trepar para huir de un perseguidor, utilizando su fuerte impulso trasero y las uñas retráctiles extendidas para agarrarse.
De muchos es conocido que los gatos mantienen sus uñas escondidas en sus patas y que sacan voluntariamente. Tienen un total de 18 dedos, 5 en cada pata delantera y 4 en cada trasera.
La ventaja de mantenerlas escondidas es que se mantienen bien afiladas para cuando llegue el momento de utilizarlas. Junto con las almohadillas, permiten al gato caminar sigilosamente para acechar a la presa sin hacer ruido y atacarla por sorpresa.

Las uñas retráctiles facilitan la subida, pero dificultan la bajada... cuántas veces has tenido al gato subido en un árbol u otra altura y el muy jodio no es capaz de bajar solo!
Las uñas se curvan hacia atrás y hacen que el gato se las ingenie de mil maneras para bajar.
Normalmente si es por gusto, tras subir suele bajar de rama en rama en espiral hasta que ve que puede saltar al suelo. Si la rama se encuentra muy alta respecto del suelo, lo que intentará es bajar de espaldas agarrado al tronco hasta que se gira y salta al suelo.

Si ha tenido que subirse rápidamente como en una huida, no le ha dado tiempo a ver como sería la bajada y ni la subida, es posible que se quede maullando el lo alto esperando que le encuentren.
En ocasiones no es tarea fácil bajarlos ni convencerlos llamándolos, y hay que usar una escalera. Pero, ¿y si se ha subido en un árbol enorme o un alto tejado? ¿a quien recurrir? ¿Os suena un camión rojo con una gran escalera?

Nunca he tenido que recurrir a ellos, por suerte, pero me he tenido que subir a un pino de 5 metros de altura a por un gatito que no paraba de maullar desesperadamente y la madre estaba como loca llamándole. Pues con un poco de maña y una silla, me encaramé al pino, con las ramas muy juntas y llegué hasta él. Pero una vez arriba encontré otro fallo mío, ¿como bajar al gatito si uso las dos manos para bajar y no matarme? Con la boca.
Como era muy pequeño, pude cogerle del cuello como lo hacen las gatas y bajarle así.
Menudo espectáculo y la bronca de mi madre cuando me vió subida a esa altura. Menos mal que no se volvió a subir más arriba de la segunda rama!!!

Desungulación: ¿si o no?
Es la práctica de extirpar quirúrgicamente las uñas del gato. Personalmente me parece una mutilación atroz, pues con la uña pierden una parte importantísima para un gato como es la defensa. Un gato sin uñas para que no arañe los muebles o cortinas... si se te escapa no podrá trepar a un árbol para esconderse de un perro u otro ataque.
Piénsalo, ponle rascadores para que las afile ahí pero no le mutiles.
Es como si para que no marque le cortamos la picha, o para que no te muerda le quites los dientes!!!
Una gata mía tras un accidente del que pensamo había muerto, sobrevivió y encima estaba preñada. Pues no sé si por genética o por malformación tuve un gatito sin uñas. Comprobé que al estirarle el dedo sí tenía el hueso pero carecía de uña. Nunca sabré si podía haberlo criado para comprobar la genética, porque le gusto mucho a un familiar al que se lo regalé y se lo mató un gato mayor por dejarlo suelto, sin sus uñas no se pudo defender. Un besito para mi pequeñín.
 
2/01/2008 02:33:00 a. m. Creado por Houseki Gk
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